Impactos mayores
Al estudiar con detenimiento la reforma tributaria que, según sus autores, tiene como objetivo establecer un mundo económico pleno de oportunidades mediante la aplicación de la equidad tributaria, se encuentra que las políticas contenidas en esta ley van a conducir a decisiones que irán justo en la dirección contraria.
Empecemos por decir que el Ecuador es un país con insuficiencia de capital. Que requiere de créditos e inversiones externas para poder crecer y mejorar sus condiciones de vida. Por ello ha mantenido una cuenta abierta de capitales que genere competencia a la banca nacional y complemente su financiamiento. De ahí que la deuda externa privada sea de 7.000 millones de dólares, muy similar a la cartera del sistema financiero nacional.
Sin embargo, las reformas tributarias apuntan en la dirección contraria. Crean barreras a la entrada y salida de capitales, a los créditos externos, al financiamiento de importaciones mediante cambios profundos y radicales a las relaciones del país con el resto del mundo.
De entrada está el impuesto del 0.5% a la salida de divisas que es una declaración oficial de los temores que sienten porque no están seguros de lo que están haciendo y ponen obstáculos para que la gente no saque el dinero, pero con ello generan duda, desconfianza y consiguen lo opuesto.
Luego imponen dos condiciones sumamente onerosas para que los intereses de los préstamos externos contratados por las empresas privadas y personas sean deducidos en el cálculo del impuesto a la renta: la primera que el monto del endeudamiento no supere el 300% del Capital Social o el 60% de los activos para las personas; y segundo que el beneficiario del exterior de estos intereses pague el 25% de impuesto a la renta, para lo cual el deudor nacional hace de agente de retención. Esto se aplica también a los intereses de los créditos conseguidos de los proveedores de importaciones.
Anteriormente, cuando se contrataron los créditos externos los intereses no estaban sujetos al impuesto a la renta, no existía ninguna retención, el endeudamiento no tenía límite, pero debían registrarse en el BCE y la tasa de interés no debía superar el máximo permitido.
En la práctica estos cambios, por la forma como están definidos, producen un estrangulamiento del financiamiento externo del país, pues el encarecimiento y las limitaciones de endeudamiento impuestas van a provocar una salida neta de divisas del país con caída de depósitos. Se produce un “cierre repentino” de ingreso de capitales y un congestionamiento crediticio interno para pagar lo que se debe afuera que, dada la dimensión del problema, no podrá ser atendido.
El límite del 300% no tomó en cuenta que los bancos de micro crédito y las cooperativas están endeudados por montos mayores para prestar a los pequeñitos, con lo cual pusieron un interrogante a la continuidad de esta actividad. ¡Aquí pagan los más desprotegidos! pues la solución camina por la contracción y selectividad crediticia, que también está inducida por el control de intereses de este segmento.
Canadá acaba de decidir exactamente lo contrario. Levantó todas las restricciones al ingreso de capitales pues quiere crecer. Aquí obramos en dirección contraria.
DESTACADOS
Reforma tributaria generará un estrangulamiento externo con salida neta de divisas y caída de depósitos.
Colaboración
Editorial Diario EL COMERCIO
Enero 10 del 2008