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Inquietudes nacionales

¿Por qué motivo el FMI o el Tesoro Americano auxilia o presta con gran facilidad a Uruguay, Brasil y Paraguay; mientras que se muestra tan difícil para la desesperada situación Argentina y la menor cifra de 240 millones de dólares para el Ecuador?


A la distancia las cosas parecen diferentes. Los problemas del Cono Sur son enormes. Las penurias de los habitantes de Uruguay se ven todos los días en los rostros de la televisión internacional. Las dificultades de los brasileños y la descomposición casi general de Paraguay no tiene comparación con lo que ocurre aquí. Por lo tanto esperar que los EEUU y los multilaterales tengan una conducta igual con todos no es realista. Simplemente las realidades son distintas. Los esfuerzos por corregir los problemas tienen características diferenciadas. No es lo mismo tratar con un país que tiene una conducta macroeconómica razonablemente adecuada, como es el caso de Uruguay, que se vio contagiado por la crisis Argentina y que perdió el 45% de los depósitos bancarios, dentro de un sistema en el cual el 75% de los bancos son estatales y cuyos depositantes mayoritarios provienen de sus países vecinos, que ayudar a una sociedad política y económicamente destrozada que no logra articular un programa de reordenamiento económico.


Brasil hace esfuerzos por controlar sus dificultades. Cuida las finanzas públicas, mantiene una política monetaria muy rigurosa, mientras Argentina sigue emitiendo 14 diferentes tipo de monedas sin control alguno. Paraguay con toda su desarticulación política se empeña en una corrección económica. Entonces, no esperemos que a estos tres países que buscan soluciones con dolor no les asistan o les den el mismo tratamiento de aquel que no consigue descifrar su laberinto.


En lo que concierne al Ecuador, la demora se resultado de la falta de credibilidad creada por los incumplimientos de gasto público y los desmanes que se conocen ahora. El monto requerido por fortuna es pequeño. Lo valioso es el apoyo que genera el acuerdo y los controles de fin de período que se imponen.


Al FMI se le acusa de no ayudar a tiempo, y esa crítica es pertinente para algunos casos, pero no lo es para los países citados. Actuó rápidamente. Mas bien lo que ahora se ve es un cambio en la posición de EEUU que no quiso involucrarse con Argentina y que miraba por encima del hombro a Latinoamérica. Los resultados de su desentendimiento agravaron las percepciones negativas sobre la región, por lo cual ahora busca recomponer y recrear el liderazgo abandonado.


¿Por qué se ha producido tanto escándalo con el aumento de sueldos públicos que venían represados desde antes de la dolarización?


El problema no es el aumento per se sino la forma como se lo ha hecho. A nadie se le ocurre aumentar gastos sin contar con los ingresos permanentes y previsibles. En ninguna actividad se comprometen gastos futuros sin los financiamientos debidos. Pues bien, esto que es el pan de cada día en todas las actividades económicas no es respetado cuando se trata de las finanzas públicas. Pero el análisis no queda ahí El Estado al asumir una política de incremento de la magnitud realizada conspira con la estabilización del país. La dolarización protege el valor de los salarios de una devaluación y los vuelve rígidos a la baja, pero inflexibiza la política de gasto fiscal y dificulta la construcción de una mas eficiente y socialmente mas justa.


En el año 2001 el Presupuesto del sector público no financiero gastó 1.360 millones en remuneraciones, con una representación del 7.6% del PIB. En este año subirá a 2.120 millones, 56% mas alto con un peso del 10% del PIB. ¿Quiénes van a pagar este aumento?; ¿Han mejorado la calidad de los servicios públicos?. ¿Cuánto va a costar en el año 2003?. ¿Qué pasa si el precio del petróleo baja?.La dadivosidad con dinero ajeno sólo conduce a reconocer la vieja historia del país. En todos los programas económicos la intromisión del populismo económico y la creencia que eso acarrea votos desarticuló la posibilidad de tener etapas largas de una razonable estabilidad.


¿Las diversas cámaras de producción, que demandan la ruptura con la CAN, fundamenta su posición en una grave caída del sector industrial y un grave aumento del desempleo. ¿Son verdad estas cifras?


No se ve en los indicadores de producción ni en los de empleo.. Hemos hablado y escrito tanto sobre la dolarización que ya todos sabemos al agüita que una de las amenazas proviene de las relaciones internacionales y que se debe mejorar la productividad. Ya no hay cómo bajar costos deprimiendo los salarios para poder vender. El camino es mas difícil, tortuoso, con enormes complejidades, pero hay que recorrerlo. En el Ecuador apenas el 5% de las empresas exportadoras tienen certificaciones de calidad ISO. Nos falta incorporar al 95% para que sus sistemas y funciones de producción tengan estándares internacionales. En el campo industrial sólo el 10% tienen este certificado. Entonces cuando hayamos alcanzado otro estadio de productividad y no podamos vender afuera tendríamos el derecho de decir que se acabó el horizonte. Ahí deben empeñarse los empresarios y las autoridades, mientras de manera simultánea el Estado adopta una política comercial activa y de protección frente al uso del tipo de cambio por parte de nuestros competidos.


Es evidente que existen tropiezos para alcanzar el acuerdo con el FMI. Como nos manejaríamos fiscalmente en el lapso actual hasta que el nuevo gobierno asuma el poder.


Con absoluta austeridad. Sin embargo dado el monto de recursos comprometidos para los aumentos salariales, el recorte del gasto afectará al pago de los servicios que usa el estado, a las asignaciones de diversa naturaleza y a algunos programas de inversión. Es difícil bajar 500 millones en menos de seis meses.



¿Cómo marcha la estabilidad de los precios del petróleo en el mercado internacional? ¿Lo estabiliza la creciente tensión de Irak?


Mientras subsistan las amenazas de guerra que pueden extenderse a otros países y hasta tanto la OPEP no cambie su política actual, el mercado favorecerá a los productores. Pero tan pronto se cumplan los objetivos estratégicos de acumular petróleo de los EEUU, las condiciones tenderían a deprimir el precio.


Esto que luce lógico puede cambiar violentamente si surge algún hecho no esperado. Este producto ya a demostrado que tiene una conducta de difícil predicción. Por eso precisamente es necesario preservar recursos y no gastarlos de una manera poco previsiva.



Colaboración Editorial

DIARIO EL COMERCIO

Agosto 15 del 2002

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