Inquietudes nacionales
Está el sector floricultor de la Sierra en capacidad real de apoyar al Gobierno dando empleo a los damnificados de la Costa que han perdido cultivos y empleos?
Es una intención noble pero poco práctica ya que no existen las condiciones económicas que permitan visualizar nuevos puestos de trabajo en un futuro cercano, ni veo una disposición del gobierno para establecer un plan de esta naturaleza.
Lo que se aprecia es un proceso de optimización de recursos humanos dadas las limitaciones potenciales del mercado norteamericano como consecuencia de la renovación de corto plazo del Atpdea que no ofrece un incentivo para la ampliación de las áreas en cultivo.
A lo anterior se suma el aumento de los precios de los insumos importados y el impacto del incremento de 30 dólares en los salarios que han creado cuellos de botella en muchas empresas florícolas.
Este sector ocupa entre 20 y 22 trabajadores por hectárea y se calcula que emplea directamente cerca de 85.000 trabajadores e indirectamente en labores de apoyo otras 44.000 personas. En términos redondos son 130.000 hogares que viven de esta actividad y que de no tener un apoyo público con una política económica abierta y de negociación de tratados de libre comercio, también ellos están en peligro.
¿Qué efectos producirá la eliminación de la tercerización en el mercado del empleo?
En la ley actual el concepto de Tercerización Laboral no existe. Lo que hay es Intermediación Laboral que define la contratación a través de una empresa que ofrece este servicio de trabajadores que realizan labores propias del negocio. Las normas legales actuales son precisas y no generan distorsiones en el tratamiento laboral pues se respeta todos los beneficios o derechos. De ahí que si la eliminación planteada se refiere a este esquema, no debería existir un impacto real en la ocupación de mano de obra.
Pero si de lo que se trata es de limitar la Tercerización de Servicios que se utiliza para labores que no son propias del negocio, el impacto si puede ser importante ya que implicaría un cambio en la estructura de las empresas y posiblemente la eliminación de algunos de estos servicios, como el de alimentación, o el de seguridad, para citar dos ejemplos.
También puede tener efectos contraproducentes una limitación de la contratación por horas, que actualmente permite tener hasta un 20% de la nómina para actividades que no demandan atención completa, y cuya remuneración ya toma en cuenta todos los beneficios del trabajador permanente. En este caso su restricción también afectaría la demanda de mano de obra, aunque ésta sea de tiempo parcial, pero que cubre en algo una necesidad social.
La flexibilidad laboral construida sobre bases de equidad y trato justo es muy recomendable pues se adapta a un mundo que tiene muchas particularidades y que requiere de diferentes tratamientos laborales.
¿Qué importancia tiene para el futuro inmediato la apertura de una oficina comercial del Ecuador en Irán?
Ninguna. Hay otros mercados mucho más atractivos y potenciales.
¿Existe el peligro de que la exitosa comercialización en las bolsas de productos principalmente agropecuarios hayan entrado en una fase recesiva por la saturación de los mercados?
No hay indicaciones en ese sentido a pesar de las dificultades económicas de los EEUU que atraviesa por una etapa recesiva de la que se espera efectos contractivos en las compras de los productos prescindibles. Pero los básicos como la soya, el maíz, el trigo, la cebada, la carne, los lácteos siguen muy demandados.
El temor radica en la capacidad de reacción de la producción mundial frente a una nueva demanda de algunos de estos productos con fines de generación energética, y la incorporación de nuevos consumidores en los países emergentes.
Los comentarios sobre el rebrote inflacionario de los alimentos y la energía y el peligro de que las políticas económicas pierdan su capacidad de mantener la estabilidad, son posiblemente los que predominan en los medios de comunicación económica. Reaparece el viejo y conocido dilema entre aceptar una etapa de pérdida de crecimiento pero con estabilidad, o lo contrario.
Con la caída del quinto banco de inversión más grande de EE.UU., Bearn Stearns, ¿se puede decir que la crisis financiera internacional ha comenzado o está por terminar?
Difícil dar una respuesta concreta a la pregunta. Algunos piensan que lo peor ya pasó, especialmente para el sistema financiero americano que ha tomado provisiones suficientes para cubrir las pérdidas de los créditos hipotecarios de baja calidad de garantías (sub prime). Para otros, la crisis sólo entrará en etapa de recuperación cuando los precios de los bienes raíces dejen de caer y se reactive ese mercado hipotecario, lo cual podría estar ocurriendo al conocerse que febrero ya reportó tasas positivas de crecimiento en ventas e hipotecas luego de siete meses de caída. Hay quienes piensan que el stock de viviendas por vender todavía es muy alto y alcanza a una demanda de 10 meses, cuando lo normal son 3 meses. No faltan aquellos que ven que los bancos europeos y asiáticos todavía no enseñan sus daños crediticios y que la crisis caminará por ese sendero.
Lo cierto es que los inversionistas privados están asustados y con su conducta han contaminado otros productos que no tienen problemas de valoración crediticia pero que no encuentran liquidez del mercado. Ante esto el FED no sólo que ha reducido de forma acelerada las tasas de interés sino que ha decidido persuadir al mercado para que cambie su conducta combatiendo la iliquidez con líneas de crédito de corto plazo de gran envergadura y una amplia gama de objetivos.
¿Por qué hay tanta diferencia entre las cifras de crecimiento del Ecuador en el 2007?, el Banco Central dijo que la economía había crecido 2,6% y ahora el FMI dice que fue 1,8%.
Porque la estimación del BCE supuso que en el último trimestre se produciría una recuperación económica que significaría un vuelco en la conducta nacional con un crecimiento superior al 6%, promovido especialmente por la inversión pública y una actitud positiva de las actividades privadas.
La opinión del FMI se sustenta en la caída de la producción petrolera en especial de Petroecuador y en la pérdida de dinamismo de la economía no petrolera, especialmente como resultado de las incertidumbres creadas sobre el contenido de la nueva constitución y la indefinición de temas fundamentales de política económica.
Este resultado es el más malo de toda la etapa de dolarización y determina que el crecimiento del PIB per cápita sea de sólo el 0.3% con lo cual cualquier programa de mejoramiento del empleo y la equidad no tiene asidero.
DESTACADOS:
La flexibilidad laboral construida sobre bases de equidad y trato justo es recomendable en un mundo competitivo.
El PIB per cápita del 2007 creció el 0.3%. Cualquier programa de mejoramiento del empleo y la equidad no tiene asidero.
Colaboración Editorial
DIARIO EL COMERCIO
Marzo 28 del 2008